El alojamiento de sitios web es la infraestructura que hace funcionar tu sitio web y lo pone a disposición de los visitantes de todo el mundo.
Las empresas de alojamiento web cuentan con un centro de datos. Esto es un edificio lleno de ordenadores diseñados para alojar webs (servidores).
Los servidores se encargan de almacenar los archivos y el contenido de tu sitio web y permanecer funcionando sin descanso para que tu web esté accesible siempre.
Todos los sitios web tienen algún tipo de alojamiento web, ya sea una web gigante como Amazon o un pequeño sitio.
Cuando pagas por un hosting web, básicamente estás alquilando espacio en un ordenador. Puede ser una parte de un ordenador que compartes con otras personas, un ordenador entero o incluso un espacio en una red de ordenadores (también conocida como «la nube»).
Una vez que tengas el alojamiento de su sitio web, puede estar visible para cualquier persona en el mundo.
Al igual que puedes instalar el software (por ejemplo, aplicaciones o juegos) en tu ordenador personal, también puedes instalar software en tu hosting web.
Por ejemplo, si quieres hacer un sitio web con WordPress, primero necesitarás un hosting (el hardware). Luego, puedes instalar WordPress (el software) en tu alojamiento web. Y listo, ya tienes los fundamentos básicos de un sitio web al que pueden acceder personas de cualquier parte del mundo.
Diferentes sitios web tendrán diferentes necesidades de alojamiento cuando se trata de los recursos que se necesitan para alimentar el sitio web.
Un sitio web con mucho tráfico y muchos recursos necesitará un hosting con mucha potencia para manejar la carga de trabajo, mientras que un sitio con poco tráfico estará bien con menos potencia.
¿Qué tipos de hosting existen?
Ahora que sabes lo que es el hosting, vamos a repasar los cinco tipos principales de hosting de sitios web.
Todos estos tipos de alojamiento son totalmente capaces de funcionar con sitios web creados con WordPress (nuestra herramienta favorita para crear webs).